A los pequesabios no nos paran, ahora investigamos que fórmula podríamos utilizar para que nuestras pompas de jabón fueran más duraderas. Hemos encontrado en internet que mientras más puras sean las sustancias empleadas mejor, por ello hemos utilizado agua destilada explicando a los niños la diferencia con el agua del grifo que contiene algunos minerales como el calcio y el magnesio que forman la cal. Además hemos agregado a nuestra mezcla dos componentes secretos, azúcar y glicerina, que ayudan a espesar dicha mezcla. Comparamos las pompas que salían con una mezcla de agua del grifo y jabón y otra en la que echamos todos los ingredientes citados y obtuvimos buenos resultados , sobre todo nos dimos cuenta de que las pompas no sólo eran más fuertes, tardaban menos en romperse, sino también que eran más elásticas y jugamos a atraparlas con nuestros pomperos y moverlas. ¡Qué divertido! Seguid experimentando en casa y si hacéis nuevos descubrimientos, no dudéis en hacédnoslo llegar. Por cierto, ¿Conocéis a alguien que pueda enseñarnos cómo hacer pompas gigantes? Por favor, que se ponga en contacto con nosotros, sería genial.
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